El ataque sistemático que está enfrentando la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI) que viene desde la cabeza del Ministerio Público (MP) es el más grave error de la Fiscal General, María Consuelo Porras Argueta, al ponerse del lado del Pacto de Corruptos, porque se supone que ella debería ser quien luche contra la corrupción.
Estamos frente a una Fiscal General que en vez de apoyar a una de las mejores fiscalías del MP, trata de socavar el trabajo que realiza la FECI, con denuncias espurias y ridículas presentadas por una Fundación afín a corruptos, prófugos e impunes, que crea un terrorismo mediático contra el fiscal Juan Francisco Sandoval, algo que debe ser rechazado de inmediato por parte de Porras Argueta.
Esa persecución en contra de la FECI con el apoyo del mismo sufrió un revés, porque resulta que la Fiscal General en su afán de socavar el trabajo de dicha fiscalía, contrató a la abogada Karin Orellana Pinto, nombrándola Fiscal Especial para investigar a Sandoval, pero ante publicaciones de prensa que señalaron a Orellana Pinto como asesora del exministro de Comunicaciones, José Luis Benito, a quien la FECI le incautó Q122 millones, el MP tuvo que recular en la contratación.
Pero por si eso fuera poco, en la misma semana, la Policía Nacional Civil (PNC) capturó a Erasmo Martínez Díaz, señalado de delitos relacionados con la narcoactividad, en un Centro Comercial de Mixco, quien es pareja sentimental de Karin Orellana Pinto. Otro grave error que le pasará factura a la Fiscal General.
El ataque constante en contra de la FECI busca desgastar al fiscal Juan Francisco Sandoval, embate que sin duda es por el buen trabajo que ha hecho y por ser el legado de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), que para muchos es causante de sus desgracias, por haber sido descubiertos en actos de corrupción.
Lo interesante es saber quién o quienes asesoran a la Fiscal General para que realice este tipo de contrataciones anómalas. Seguramente serán también personajes que tienen algún interés de sacar al Fiscal porque probablemente estén involucrados en un caso que lleva dicha Fiscalía.
La sociedad civil ha declarado que la Fiscal General es un alfil de la impunidad que impera en el país, pues no mueve ni un dedo para enfrentar este mal, se encuentra vigilante escudándose en que cumple con la Ley y la Constitución y que es respetuosa del Estado de Derecho y toda una verborrea que nadie entiende.
Renuncie ya Consuelo Porras.
