Desde hace algunos meses, varios periodistas de investigación han sido intimidados por ciertos pronunciamientos y actitudes de miembros de órganos del ejecutivo. Esto constituye una alerta al gremio periodístico y una alarma a la sociedad que debe proteger la libertad de prensa, la cual entraña la posibilidad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas de toda índole.
Debe recordarse que la libertad de prensa está íntimamente vinculado al derecho de libertad de expresión y pensamiento que nos atañe a todas las personas. El estándar democrático enunciado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos en su opinión consultiva 5/85 señala que la formación de opinión pública es una condición para que las sociedades puedan desarrollarse plenamente, situación que requiere acceso a información variada.
Gobiernos que intimidan a la sociedad para que no se exprese o, en alguna medida, intimidan o amenazan a periodistas para que estos desistan de la investigación periodística, son contrarios a la democracia y a la consolidación política de sociedades plenamente libres.
La libertad de expresión y de prensa entrañan un doble estándar de protección, individual y social, es decir, no solo poder emitir opinión, si no, acceder a toda índole de información quedando en las personas la admisión de estas o su desacuerdo con ellas. Por supuesto, la ética periodística debe tener presente la forma en que se distribuye la información, teniendo en cuenta que no puede publicarse situaciones que denigren a las personas o atenten contra la vida privada.
Por lo expuesto, si algún funcionario de gobierno cree que se ha abusado de estos derechos puede acudir a las formas procedimentales que la Constitución propia ha normado. Pero nunca debe acudir a la intimidación, seguimiento y amenazas a ningún periodista o medio de comunicación social.
No es nuevo que los ataques existan, ya el PDH en noviembre del año pasado declaró violaciones a la libertad de expresión que fueron víctimas varios periodistas por parte del gobierno de Jimmy Morales.
Entre todo esto, debe celebrarse que siempre surjan nuevos medios de comunicación social, pues esto viabiliza el estándar democrático y de doble dimensión que he expuesto ya en este artículo. Su aparición entraña desde ya obligaciones al Estado, recordando que la actividad de los medios de comunicación es de interés público.
Bienvenido a Epicentro GT al mundo de los medios de comunicación. Será sin duda un espacio que sumará a la posibilidad de información, de opinión y de conocimiento. Desde ya enfrenta grandes retos y hondos desafíos en un país que aún se encuentra en proceso de salir de aspectos históricos que no permiten a la democracia llegar a un nivel admisible.
Además de los retos propios, la solidaridad con los periodistas bajo intimidación será importante y, entre muchas cosas, se viene la lucha por consolidar el derecho humano al internet, con lo cual se garantice que toda persona pueda acceder a medios de comunicación electrónica.
