La pandemia que enfrenta el mundo a causa del coronavirus COVID-19 ha puesto en jaque a los sistemas de salud endebles que tienen países como Guatemala, que a causa de la corrupción tiene una red hospitalaria precaria y un sistema de salud fracasado.
Desde que inició esta pandemia sabíamos que nos enfrentaríamos a graves problemas a causa del precario sistema de salud, y que los que enfrentarían mayores problemas por la falta de insumos y medicamentos, de los que siempre han carecido, sería el personal médico que enfrentaría al COVID-19.
Ese personal que se ha convertido en héroe, porque con carencias han seguido dándole batalla a esta enfermedad que no da tregua a los guatemaltecos. Médicos y enfermeras en los distintos hospitales han sacrificado tiempo y a sus familias para poder atender y salvar a varios compatriotas que han sido contagiados con esta enfermedad.
Sin embargo, no son los únicos, también son héroes los bomberos voluntarios, municipales y privados que han hecho una labor exhaustiva y de gran valor para todas las familias que han necesitado de su ayuda.
Ahora conocemos que varios profesionales de la salud han perdido la vida a causa de la COVID-19, y por la falta de insumos y protección que necesitan para hacerle frente a esta enfermedad. Expresamos nuestra consternación y pésame a todas las familias de esos médicos, enfermeras, bomberos, policías, por la pérdida irreparable de sus seres queridos.
El pasado 2 de junio el Ministerio de Salud informó que al menos 35 médicos se habían contagiado con COVID-19 desde que comenzó el pico de los casos positivos. Además, 32 enfermeros también resultaron infectados, así como 22 auxiliares de enfermería, cinco laboratoristas y 14 trabajadores de intendencia. En total, 108 profesionales de la salud.
Guatemala reporta hasta la fecha un total de 29 mil 355 casos de COVID-19. Un total de 23 mil 920 casos activos, 4 mil 214 pacientes recuperados y 1 mil 219 personas fallecidas, víctimas de la enfermedad.
Lo anterior no solo representan números, sino familias que están sufriendo la pérdida de sus seres amados o están preocupadas esperando la recuperación de sus enfermos.
Extendemos un abrazo fraternal y rogamos al creador para la pronta recuperación de sus pacientes y resignación a todas aquellas familias que han perdido a algún pariente.
Por lo que hoy pasan cientos de familias guatemaltecas es que debemos exigir al presidente Alejandro Giammattei y a las autoridades de Salud, brindarle la atención debida a esos héroes que luchan todos los días por salvar vidas, pagándole sus salarios y dotarles de insumos para que puedan desempeñar su labor apropiadamente.
